Caso Marley: ¿Por qué la víctima denunció veinte años después?
Desde ‘Tarde de brujas’ analizaron lo sucedido en las últimas horas en donde un joven llamado Adrián Alfredo Molina denunció al conductor de Telefé por una presunta situación de corrupción de menores.
Claribel Medina y sus ‘brujitas’ llevaron adelante una nueva entrega del magazine más entretenidos de las tardes de Net en donde se metieron de lleno con la denuncia que circuló en las últimas horas que aseguraba que el conductor Marley Wiebe habría mantenido una relación sexoafectiva con un joven de 17 años.
Para ello desde ‘Tarde de brujas’ se contactaron con la Psicóloga Mariela Verzero, quien explicó cómo suele actuar una persona que sufrió algun tipo de abuso sexual y decidió hacerlo público y/o denunciarlo años más tarde. “En el caso de las víctimas de violencia sexual o abuso sexual atraviesan consecuencias, las consecuencias en al salud mental existen porque es un hecho traumático”, aseveró la experta.
Seguido de ello Mariela indicó: “En el caso de que exista violencia sexual puede haber lo que el denunciante que es una desviación,un corrimiento de su sexualidad, de su desarrollo normal, para que se entienda, si la sexualidad de él tenía una orientación quizás lo que él está denunciando es que su orientación homosexual se dio a partir de esta seducción o esta vivencia de abuso que tuvo con esa situación”.
Asimismo la invitada habló acerca del tipo de acusación que recibió el presentador de ‘Survivor’ en donde explicó: “Eso es lo que se llama ‘corrupción de menores’ esa es la figura de ‘corrupción de menores’ en la ley (…) a partir del 2010 cambió nuestro código civil, él está denunciando una situación que es previa, que es del año ‘91, nosotros a partir del año 2010 se actualizó el código civil y las personas a partir de los 16 años puede consentir relaciones sexuales”.
Rápidamente Verzero agregó: “Siempre y cuando no mediaren asimetrías como abuso de poder, desconocimiento, gratificación sexual, puede otorgar su consentimiento hasta los 18 puede decidir sobre su cuerpo pero no deberían de mediar estas asimetrías”.
