Miches: El paraíso dominicano que enamora con su encanto
Silvina Panizzi y su equipo inauguran la temporada de ‘Todos podemos viajar’ explorando un destino emergente en República Dominicana. Con el imponente Viva Miches by Wyndham como epicentro, esta joya caribeña promete playas vírgenes, naturaleza exuberante y una experiencia única para desconectar del mundo.
En la nueva entrega de ‘Todos podemos viajar’, Silvina Panizzi llevó a los espectadores a descubrir Miches, un rincón de República Dominicana que se perfila como el nuevo tesoro del Caribe. “Llegamos al paraíso, llegamos a Viva Miches by Wyndham, vamos a disfrutar de este maravilloso hotel y olvidarnos de todo”, exclamó la experta al llegar al resort que lidera el auge turístico de la zona.
Asimismo la presentadora expresó: “Miches es un pueblo costero ubicado en la provincia de El Seibo, en República Dominicana, es reconocido por su belleza natural, playas vírgenes y exuberante vegetación, es un destino emergente que ofrece una experiencia más tranquila en comparación con otros destinos turísticos de la isla”, destacó Panizzi, subrayando el encanto sereno que hace de este lugar una escapada ideal.
El Viva Miches by Wyndham, protagonista de esta aventura, es un deleite para los sentidos. “Este hotel se encuentra situado a lo largo de la costa virgen de Miches, es un amplio complejo en primera línea de playa que ofrece impresionantes vistas al mar”, describió la conductora mientras recorría sus instalaciones.
Con 535 habitaciones, cinco restaurantes que combinan sabores globales con la gastronommía local y una oferta de actividades que incluye desde kayak hasta excursiones a Montaña Redonda, el resort fusiona lujo y naturaleza. Miches, con su ambiente relajado y sus paisajes de postal, se consolida como un destino perfecto para quienes buscan desconexión y autenticidad.
Más allá del resort, Miches invita a explorar su entorno único. Desde paseos en bote por la Laguna Limón hasta caminatas por senderos rodeados de palmeras y manglares, el destino ofrece una inmersión en la cultura dominicana más auténtica. Los viajeros pueden interactuar con comunidades locales, degustar platos tradicionales como el sancocho y descubrir la calidez que define a esta región. Para Silvina, este rincón de El Seibo es “un paraíso que solo existe una vez”, una invitación a desconectar y reconectar con la esencia del Caribe.